Si está pensando en comprar cajas de madera baratas para almacenar el vino o cualquier otra bebida alcohólica, debe saber que en el mercado español existe una industria dedicada de lleno a este sector. Las empresas personalizan y embellecen dichos estuches con el propósito de ofrecerle el mejor producto posible.
Existen muchas opciones y diseños de cajas, pero ante el creciente mercado, no todas son baratas, aunque sí accesibles. Antes de elegir un estilo, lo primero a investigar es qué tipo de madera utilizan y si ésta es compatible con el vino, en el caso de que sea este el arquetipo de botellas que necesita resguardar.
En el caso específico del vino, por la delicadeza que les caracteriza, es ideal que se guarde en cajas de madera de roble americano o francesa, estos dos tipos de materiales son perfectos para la oxigenación que necesita el licor. También, a partir de ellas, se logra la cesión correcta de la bebida.
En cuanto al diseño de las cajas de madera, se pueden mencionar las que son pequeñas, ideales para guardar una botella sin ocupar demasiado espacio en la despensa. Mientras que aquellos considerados como amantes del vino, con grandes inventarios, encontrarán cajones con tres o más compartimientos.
Las ventajas de comprar cajas de madera baratas
Pero las cajas de madera son realmente versátiles, además de su uso reciente en el almacenaje de vinos, son utensilios ideales para organizar joyas, enseres y muchas otras cosas. Dependerá de la necesidad de cada ciudadano qué uso darle a estas herramientas que generan orden en el hogar.
Uno de los mayores beneficios de las cajas de madera, es que no son contaminantes, son fabricadas con productos absolutamente naturales y, por lo tanto, son biodegradables. Pueden reutilizarse múltiples veces y cambiar el propósito para el que fueron compradas originalmente según convenga.
Al comprar una caja de madera el cliente puede elegir si la desea al natural, es decir sin barniz, o si la quiere con un impecable acabado. Esto va determinado según el uso que se le piensa dar y considerando la personalidad del individuo que la está adquiriendo o a quien va dirigida como obsequio. Las opciones son infinitas.